
Qué historia tan absurda, ¿verdad? Pues no vean la que se ha mercao Berlusconi, de quien decíamos ayer que su conducta delictiva e inapropiada (por ser suaves) le ha costado la desconfianza (¡al fin!) del pueblo italiano. ¿Qué tiene usted que decir, señor Cavaliere? Pues que "la culpa es de mi EX mujer, de la torpe Noemí y de la fuga de Kaká". ¿De Kaká...? ¡Ah... claro! Si eg que si es por presidencias, este hombrecillo controla hasta la del Milán. Política, comuniación, deporte, escaparatismo... qué completo, pofavó.
Del abstencionismo, de luchas internas en su partido (Pueblo de la Libertad... qué jodíamente irónico es este gallo), los jodíos mass media internacionales... ¿y Berlusconim qué parte de culpa tiene? Pues parece que ninguna. Más bien se muestra como víctima de un complot e incluso asegura que "si no me hubiera presentado como candidato hubiera sido peor".
Pues nada, esta es la raza política que más abunda y que no dejamos de votar.
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