La diferencia

Un aplauso, por favor, para Gloria María Tomás y Garrido. Yo estoy totalmente bobalizada desde que supe que esta mujer afirmó, durante una conferencia en Alicante, que la masturbación sólo lleva a la perversión. Más concretamente, esta profesora de Bioética de la Universidad Católica de Murcia (ya nos vamos entendiendo), aseveró que los niños que llegan a una casa sin padres, porque trabajan, terminan haciendo “tonterías de masturbaciones, de no sé cuánto, de no sé qué”, y de ahí directos al Piscis. Aunque yo prefiero La Vie en Rose. Vamos, que la culpa de que el niño se encuentre la cuca y descubra su uso placentero o la niña ese pequeño botón (¿por qué lo llaman botón cuando quieren decir clítoris?) que sólo sirve para la perversión, es culpa de las madres trabajadoras. Bueno, yo sólo sé que Dios nos hizo a su imagen y semejanza. ¿Gloria María trabaja?
Pero es que yo soy mucho de pensar… y pensando, pensando he llegado a dos conclusiones: la primera, que la madre de Gloria María fue ama de casa (como la mía, a la que añado los cargos de profesora, ayudante de fabulosos descubrimientos, ejemplo puro de paciencia, y un largo etc. que se comería el artículo), por lo que Gloria María nunca se ha masturbado… uf, eso requiere de mucho autocontrol, autonegación, autocensura. ¿Esta mujer tiene hijos? La segunda conclusión es que, según las declaraciones de esta letrada en Bioética, yo siempre he sido pero que muy perversa… y mi madre, como creo que ya les he dicho, siempre estaba en casa cuando yo volvía del cole. A mí todo esto me suena a contradicción moralista, o a cabezonería mística, y para eso todos los monoteísmos son válidos en este experimento. Si no que se lo digan a los indonesios, a los que se les prohíbe hacerse el amor bajo pena capital. Allá profesan el Islam, el Catolicismo, el Protestantismo, el Budismo y el Hinduismo (mayoritariamente monoteísta). Pero no hace falta salir del país para encontrarnos con resquicios de esa época ya pasada de cinismo y pose de un catolicismo rancio; del Dios castigador que te vigila en todo momento; del rechazo cobarde y censurador de la diferencia. Que yo sea bisexual, hetero, asexuada o rubia, ¿qué narices les importará a todos estos calamitas? ¿De qué tienen miedo? Y encima se empeñan en seguir relacionando homo-bi-sexualidad con sufrimiento. Pero estamos de acuerdo en algo: hemos de basar nuestra existencia en el amor, que es incompatible con su rechazo brutal y público contra sus semejantes ‘diferentes’. Ustedes no son consecuentes con sus creencias. Les deseo de todo corazón que un día no tengan más salida que mezclarse con ella.


Artículos que no se puede uno perder:
Declaraciones de Gloria María Tomás: http://www.laopiniondemurcia.es/secciones/noticia.jsp?pRef=2009040600_2_161286__COMUNIDAD-profesora-universitaria-Murcia-siembra-polemica-afirmar-gays-enfermos
Supuestas rectifiacciones de Gloria María Tomás: http://www.20minutos.es/noticia/461730/0/profesora/ucam/homofobia/

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